ENTRE LA CUEVA Y LA VIDA Y EL MAR Y LA MUERTE

Llevo varios días pendiente del rescate de los niños thailandeses en la cueva. Todos los medios de información y redes sociales han hecho eco de ello y espero que el resultado sea el regreso de todos sanos y salvos a sus casas.

Este hecho me ha obligado a reflexionar sobre el tratamiento de las noticias respecto de la pérdida de vidas humanas en general e infantiles en particular.

Según la Organización Internacional de las Migraciones , desde el 2014, más del 14.000 personas han muerto en el Mediterráneo intentando llegar a Europa.

Alrededor de medio millar eran menores.

Save the children denuncia constantemente las muertes de niños y niñas que acompañan a sus familiares intentando alejarse de las guerras y del hambre.

Pierden la vida en el intento de salir del infierno creado por los mezquinos intereses de países llamados desarrollados, se encuentran las puertas cerradas y un tufo irrespirable a racismo y xenofobia en el aire.

Hemos provocado sus guerras, saqueado sus recursos pero ahora Europa , cómplice y autora constante de políticas imperialistas, cierra fronteras y mira hacia otro lado.

Nos conmueve el rescate de 12 niños thailandeses atrapados en una cueva cuando iban de excursión, pero no somos conscientes de la cantidad de niños y niñas que mueren en el mar todos los días buscando una tierra donde poder vivir.

Abran las noticias con sus cuerpos inertes balanceándose sobre las olas y quizás, solo quizás, empecemos a tratar los problemas con más justicia, equidad y conciencia.