martes, 6 de marzo de 2018


                
                                    SEAMOS CONSCIENTES

El crecimiento de la ultra derecha americana y europea, no es baladí, detrás se esconde el final del mundo conocido.

Es evidente que nos hemos cargado el planeta con infinidad de recursos que hemos finiquitado. de seguir así, los desastres medio-ambientales, la contaminación de los bienes comunes, aire, tierra y agua, nos están proyectando hacía un mundo caótico.

Tampoco es casualidad que las grandes multinacionales se estén haciendo dueñas de los manantiales y recursos naturales, previendo que la hambruna y sed global serán los negocios más seguros y  rentables del siglo.

El post capitalismo pone fronteras, no sólo de identidad, también de caudal económico.
habrá diferencias entre "los nuestros" y "los otros" porque seremos personas cuantificables por nuestro poder económico.

Y se dirá que esto siempre ha sido así... y es verdad.

 Siempre ha existido la desigualdad, pero se suponía que caminábamos hacia un mundo sin ella, hacia una igualdad real de la humanidad, con valores que ahora sólo se escuchan en los discursos de dirigentes políticos, pero con hechos completamente contrarios que recaen en la base social.

Oigo a la izquierda, oigo a la derecha y son cantos de sirena.
Abro los ojos, escucho a mi alrededor...y lo que percibo no me gusta.

Podemos tomar conciencia y cambiar el sistema, o podemos continuar camino sabiendo que sólo conduce al precipicio.

 Al menos seamos conscientes...en algo.






                          Un paro imparable


La histórica división sexual del trabajo, hombres a la producción y mujeres a la reproducción y cuidados domésticos, es el eje sobre el que pivota la alianza más cruel y perversa para las mujeres: capitalismo y patriarcado.
  
Para hacer frente al capitalismo, el hombre históricamente ha utilizado la huelga como instrumento para paralizar la producción y conseguir dignificar las condiciones laborales y sociales.
En esas luchas también han estado las mujeres.


Pero en el ámbito de la reproducción y los cuidados, las mujeres están solas.
Hay que remontarse al año 1975, en Islandia, donde las mujeres abandonaron por un día sus tareas, y paralizaron el país.


Esto hizo reflexionar a muchos hombres y a su gobierno y su consecuencia es que hoy Islandia lidera uno de los modelos sociales más avanzados en igualdad de hombres y mujeres.


Los gobiernos siervos del sistema capitalista y patriarcal dicen que la huelga del 8M divide porque resta a los hombres su protagonismo, al ser una huelga de mujeres. Nada más lejos de la realidad.


Los hombres que luchan contra la desigualdad, este 8M ocuparán los huecos que dejen las mujeres y por tanto no restan, suman, provocando que  se multipliquen las voces de las mujeres que ese día tomaremos las calles. 
Es pura matemática social.


Si nosotras paramos, se para el mundo.

 Y eso lo sabe sistema, por eso su respuesta será brutal, pero lo que se está gestando ya es algo imparable.

                                 #8MYoparo

http://www.deia.com/2018/03/06/opinion/cartas-al-director/un-paro-imparable